miércoles, 25 de junio de 2008

Icono de Navidad


En el icono, la inscripción de arriba en abreviatura y en eslavo eclesiástico dice: “Nacimiento de Nuestro Señor Jesucristo”; la fiesta del 25 de diciembre en el Oriente bizantino representa todo el misterio de la venida al mundo del Hijo de Dios y comprende también la adoración de los Magos.


En el centro, en una gruta oscura, está el recién nacido: “La luz brilla en las tinieblas”. La gruta oscura es el símbolo del mal y las fajas del Niño son como las fajas mortuorias de donde saldrá el Resucitado. En los textos litúrgicos el mismo término indica unas y otras. En lo alto, un rayo de luz, uno como Dios es uno, sale de la estrella y se hace triple, aludiendo evidentemente a la Trinidad; desciende sobre la Madre y el Hijo señalados también con abreviaturas en griego junto a la cabeza( Míter Theoú= Madre de Dios y Isús Cristos= Jesús Cristo). El pesebre parece un altar, al que están invitados los judíos, representados por el buey, y los gentiles representados por el asno, según una interpretación de los antiguos Padres.


Arriba a la izquierda, dos ángeles están en adoración, mientras otro a la derecha se lo anuncia a los pastores. Los tres Reyes Magos a caballo se dirigen hacia el Salvador guiados por la estrella. Debajo de ellos, se representa a José pensativo, en un momento de tentación en el que el diablo, delante de él y disfrazado de pastor, le hace dudar de la virginidad de María. La escena del baño significa que Jesucristo tiene una naturaleza verdaderamente humana; a la vez que se insinúa el bautismo, ya que la pila tiene la forma de fuente bautismal.


El personaje central del icono es la Madre de Dios. Acostada sobre un paño púrpura después de haber dado a luz al hijo, está vuelta hacia nosotros (son poquísimos los iconos en los que mira a Jesús); se diría que está "meditando en su corazón” el misterio de la salvación en el que ella, flor de la humanidad, nos representa a todos con su consentimiento a la encarnación, por el que ha sido hecha madre de todos. Se pueden ver bien las tres estrellas en la frente y en los hombros para indicar que permaneció virgen antes, durante y después del parto. El cielo del fondo no es azul, sino dorado como la luz divina. A la Navidad en Oriente se le llama” fiesta de la luz”.


La composición del icono se remonta a la más remota antigüedad. Las ánforas de Monza del siglo IV-V provenientes de Tierra Santa, tenían una representación parecida.


El icono, imagen de lo Invisible
Sor María Donadeo

No hay comentarios: